Un análisis por Pepe Contreras
El PSOE ha perdido las elecciones y mucho poder territorial. Pero los datos no son objetivamente malos. En Andalucía han ganado 400 mil votos y el PP ha perdido más de 100 mil respecto a 2022. El PSOE-A es la tercera fuerza del PSOE de España (en términos relativos, en votos la primera) y el PP el octavo.
«Yo creo con estos resultados el PP no lograría gobernar en España. Considero que forma parte de las «razones»: PP+Vox+Cs+UPN suman menos del 40% de los votos. PSOE + socios de investidura, más del 45%» me dice una fuente cualificada y autorizada de la organización socialista.
Pedro Sánchez ha escrito, o tenía escrito, depende, otro capítulo más de su manual de resistencia, el de cómo resistir la ola creciente del Partido Popular. Lo que no esperaba quizás el presidente y secretario general del PSOE era que más que una ola fuera un tsunami que si llega hasta el mes de diciembre habría sepultado y mandado a la historia, a la izquierda y a los socialistas.
Hablando del ‘bloque progresista’, de la izquierda, el ridículo que están haciendo sus dirigentes es espantoso y revelador de que se merecen el resultado que han tenido. Es increíble que sigan dando la nota a aquellos que tienen mucho que aportar, mucho por trabajar, pero que no se dan cuenta de ello.
Eso ha ocurrido en los pueblos, en las ciudades y a nivel nacional. Y si no se ponen las pilas, corren riesgo de desaparecer o morir de inanición.
De la Bahía de Cádiz me llaman la atención tres cosas. Primera de ellas, el triunfo sin paliativos que ha obtenido Germán Beárdo en la localidad de El Puerto de Santa María. Tiene mano libre ahora para poder moverse y transformar al pueblo, a la ciudad, a su término municipal. Tiene una encrucijada de inversiones..
El otro, que da igual si ha nacido en Jerez o donde sea, se llama Bruno García León y va a ser el próximo alcalde de Cádiz, con mayoría suficiente para gobernar. Otra cosa es que su equipo tenga la capacidad para hacerlo. Aunque está claro que todo se aprende.
Por lo visto, me cuentan internamente que las cuentas y la gestión de Kichi han sido algo más que un desastre. Veremos en qué acaba la historia.
Mientras tanto, no pierdan de vista a algunos dirigentes muy hábiles y rápidos del Partido Socialista, del nuevo PSOE, no del antiguo. Y en el antiguo, observen algunos movimientos estos días muy importantes. Se van a hacer notar. Algo se mueve y no es precisamente el tren.
El tren que tendrá que coger en su momento más de un político. Y el tren que espera tener algún día en condiciones para ser el renovado alcalde de Algeciras, Landaluceland.
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